sábado, 10 de febrero de 2007

Estaciones de descanso

Empiezo a encontrar en ti,
esquinas y cambios de sentido
de improvisto.
Y he decidido acelerar mi velocidad.

Las ruinas, el oráculo, tu pulso,
se (de)vuelven contra mí mientras me visto.

Tus manos,
y el preludio impensable que trazan
tus dedos perdidos
sobre el perfil de mis muñecas heridas.

No hay raza, no hay tiempo, no hay piel.
Tan sólo la extraña sensación de estar entrando
en ti
casi sin tocarte.

3 comentarios:

eika dijo...

Ahhh me encanta cómo escribes, de verdad.

Había perdido el post donde me habías comentado y no encontraba el camino hasta aquí... Te he linkeado para no perderme de nuevo.

Saludos!!

Show must go on dijo...

Será que esoty en una época muy chulesca, pero releo tus post y siento que he estado allí, que he vivido, o soñado(aunque yo no lo verbalizaría tan bien ni de coña) parte de lo que se esconde entre las palabras. Y, sí, mierda, envidio algunas sensaciones y que el texto no sea mío...

qué odiosos!!! ;)

Un besazo, guapa

Angus Scrimm dijo...

Pues si te inmiscuyes de forma tan cuidadosa la posibilidad de rotura disminuye hasta casi desaparecer.